El señor Político ofreció
Su corazón al pueblo
El pueblo tenía tanto hambre que se lo comió
Por eso hoy el señor político habla sin corazón
Y no es su culpa
Es culpa del pueblo
(por tener hambre)
Con autorización del autor http://chelocandia.blogspot.com/
Especial escritores participantes de http://lasconversaciones.blogspot.com/
1 comentario:
Ingeniosa manera de declarar la realidad.
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