jueves, 30 de agosto de 2012

En esta noche cerrada - William E. Fleming

La luna me dice tu nombre, en esta noche cerrada.

Escucho de sus labios de argenta,

pronunciarte de forma velada,


como el sonido mismo

de la musa a los oidos del poeta.


En esta noche cerrada,

escucho a la Luna decir tu nombre.

Y acallar todas mis lágrimas.

Saborear tu recuerdo en mi boca.

Para sonreir en la noche callada.


En esta noche cerrada,

escribo los versos que cita,

amor, candor, y sentimientos...

Nacimiento — Ada Inés Lerner

De mi niño inocente he abierto los ojos

a los campos felices de su visión

sonrío, quiero oír su nueva risa sonora,

y en mi corazón escondí los rencores


Nada contaminará sus sueños felices

todo mi dolor oculté sin lagrimas

la sucia red de ambiciones humanas

nada ni nadie podrá herir su razón


en las flores blancas ilusión el rocío

será puro el amor en las rojas flores

polvo de estrellas cada una de ellas,

de lilas, alelí y amapolas los perfumes


conozco el suelo donde crece el centeno

y la semilla para plantar el arroz

nubes en un cielo color de esmeralda

y la luz de la vida que me da el sol


en el cielo sagrado de la eternidad

por el Señor nuestro Dios

mi niño no será olvido

ni guerrero de hierro ni palabra inversa

que dañe hiriente ningún corazón

Lontano - Ana Caliyuri

Escojo

un lejano
retrato

en él


diviso

que el infinito

gozaba

de transparencia

y las pupilas

inexorables

se asombraban.

miércoles, 29 de agosto de 2012

Exhibicionista - William E. Fleming

Yo voy a ser exhibicionista
plasmar mi carne sedienta
de datos impuros y deseos de gritos,
encima de la mesa
desgarraré mi pecho y dejaré el corazón
palpitante, caduco
mientras me masturbo para vuestro goce.

Así es la vida del autor
que irrumpe en este mundo,
llorando como un crío al nacer,
supurando bilis de versos,
poemas y canciones.
Sin creer, ni saber, y menos desear ver,
que no es el único estúpido que grita.

Cicatrices - Guillermo Vidal

Las flores del paraíso,
son frutos fugaces,
sangran,
y beben solo para saciar

las heridas.
Afiladas, besan,
desoladas ríen,
despojadas quitan.
Mueren,
un segundo después.

Efímero – Ada Inés Lerner

“…el palacio de la noche”
A. Pizarnik

nacerá

náufrago en un lecho blanco

nacerá
desamparado tu nombre en la nostalgia del abrazo y el desborde

nacerá
inútil profeta de espíritu nocturno
en mi cuerpo sediento

nacerá
asombrado, plegaré mis alas

nacerá
magnifica esta tormenta
como un salmo bajo el cielo piadoso
que culmina y goza un nuevo desafío

nacerá
azorada mi piel se despierta libre
y vuela al nimbo dorado
donde se refugian los dioses

Nacerá como un antiguo paisaje
porque fui la elegida
para romper el espejismo antiguo

“antiguo es el viento y mirá como sopla"

miércoles, 22 de agosto de 2012

Sobre mis pasos - Eve V. Gauna Piragine

Hoy voy a empezar
a desandar el camino
hasta encontrarte
para encontrarnos.
Voy a volver al punto
de donde partimos juntos
sin darnos cuenta
que el tiempo
todo lo mata o se lo lleva.
Y perdimos los momentos
cuando no nos bastaban
los besos
que ahora nos sobran,
las caricias incanzables
nos dejaron
las manos cansadas,
aferradas a caricias
dormidas, desganadas.
Buscando sueños
dejamos de soñarnos,
de sentirnos, de vivirnos.
Dejamos tanto después
que nos quedamos
sin después, llenos de ayer
pero vacíos de mañanas.
Hoy voy a buscarte hasta encontrarte
para encontrarnos... de nuevo.

De vos - Fernando Andrés Puga

No soy el mismo de ayer.
Mañana seré otro.
Cambio.
A veces vuelo y desde lo alto te veo llorar al acostarte,
entonces amanezco payaso al día siguiente.
Si en cambio estás inquieta,
me transformo en océano de calma.
Si te apagas,
soy llama.
Si huyes,
soy tu sombra
y si acaso te quedas sin palabras,
seré tu escribidor
para que sigas viva.

Gramática del desencuentro - Oscar Barrionuevo

qué dura ausencia
la que tengo
haber vuelto y sentir
que me quedé en otra parte
recomenzar estos pasillos de siempre
y saberme lejos
habitando otro espacio
qué peor ausencia
que la de caminar el olvido
donde empecé a quererte
qué haré con lo que fue y
no fue nuestro
con el allá más que con el aquí
sin encontrar un adverbio intermedio
qué peor ausencia
que la de saber que no habrá
ninguna esquina
en donde nuestros nombres se crucen
vos y yo sólo somos el
comienzo de una palabra
que no se ha escrito
o el final de un verbo
mal conjugado

Del libro Gramática de ausencias y descuentros
http://poesiasyrelatosdebarrionuevo.blogspot.com/

Noche en vela - Jana Muneva

Me nombraste
con tu voz de viento,
entonces, me preparé
para navegar tu marea verde.
Pero te retiraste en bajamar
y quedé encallada,
desplegadas las velas
sacudiendo un ruido seco.
Quedó tu eco, nombrándome.
Tu hueco, resonando.
Esperaré una noche,
con las velas bajas
y el pelo suelto,
a que otra vez
tu viento me rocíe
con el agua salada.
Mientras tanto respiro
con los pies colgando de la barca
mojándose en la orilla.

lunes, 20 de agosto de 2012

Te vi parir, te vi nacer - Daniel Frini

Para Max y Adri
que me hicieron tan feliz
y tan único
(1989)


Sí.
Ya sé que en el mundo hay un montón
de noticias importantes.
Pero hoy,
a quién le importa saber no sé qué cosas
Si acabás de parir;
si acabás de venir.
Está bien.
Debe ser el milésimo parto de este mes
y el número un millón en lo que va del año.
Pero es especial porque
justamente vos
acabás de parir,
justamente vos
acabás de nacer.
Y fue tan lindo verte llorar amor, mientras pujabas,
con una fuerza tan nueva y milenaria,
tan hermosa que estabas.
Y fue tan lindo verte llorar bebé, llenando tus pulmones,
caricias de aire y de lágrimas,
tan hermoso que estabas.

Quiero emborracharme de alegrías
de viejas nostalgias
de vaya uno a saber qué extrañas causas.
Delicias de haber visto este milagro,
de ser testigo de esta luz tan grande.
Buena noticia la de hoy mis vidas.
No va a estar en los diarios.
Entonces yo la digo:
Te vi parir, mi amor;
bebé, te vi nacer
Te vi
parir
mi amor;
bebé,
te vi
nacer.

Chaco - Viggo Mortensen

Me cago en la selva
como los monos
con sus dientes
perfectos y amarillos
sin tenerle miedo
a ningun tigre.

Vencidos - León Felipe

Por la manchega llanura
se vuelve a ver la figura
de Don Quijote pasar.

Y ahora ociosa y abollada va en el rucio la armadura,
y va ocioso el caballero, sin peto y sin espaldar,
va cargado de amargura,
que allá encontró sepultura
su amoroso batallar.
Va cargado de amargura,
que allá «quedó su ventura»
en la playa de Barcino, frente al mar.

Por la manchega llanura
se vuelve a ver la figura
de Don Quijote pasar.
Va cargado de amargura,
va, vencido, el caballero de retorno a su lugar.

¡Cuántas veces, Don Quijote, por esa misma llanura,
en horas de desaliento así te miro pasar!
¡Y cuántas veces te grito: Hazme un sitio en tu montura
y llévame a tu lugar;
hazme un sitio en tu montura,
caballero derrotado, hazme un sitio en tu montura
que yo también voy cargado
de amargura
y no puedo batallar!

Ponme a la grupa contigo,
caballero del honor,
ponme a la grupa contigo,
y llévame a ser contigo
pastor.

Por la manchega llanura
se vuelve a ver la figura
de Don Quijote pasar...

Poema 30 - Hugo Sánchez


Llegamos hasta el cañón oxidado del Tano
todavía apuntando en la dirección correcta.
La noche del 13 de junio,
desde el punto más alto del Wireless Ridge
lo disparó sólo cinco veces.
Aunque el disparo certero fue el sexto
...hacia la vida.

jueves, 16 de agosto de 2012

Legado - Fernando Andrés Puga


Leí en tu piel que no llega la noche
sin llamarla

Leí en tus manos que el tiempo se acaba

alguna vez

Leí en tus ojos que será de agua

el último planeta

Leí en tus labios

el silencio


el Autor: Fernando Andrés Puga

¿Y Hölderlin y Susette..? - Carlos Barbarito


¿Y Hölderlin y Susette,

Novalis y Sophie?

¿Dónde  ahora el tiempo

en que se amaron,

sus escasas horas propicias

entre lo vivo disperso?

¿Se recuerdan uno a la otra,

situados ya más allá de las estrellas,

recuerdan fugaces mutuas caricias,

fugaces mutuos olores,

la fugaz ebriedad de estar,

una ante el otro, desnudos?



el Autor: Carlos Barbarito

martes, 14 de agosto de 2012

Perfume de Sabato por la mañana – Guillermo Vidal

Velamos un cadáver que no necesita
de nuestra custodia.
Estamos aquí por nuestra cuenta
temerosos de abrir un hueco en la tierra
para enterrar el pasado
y dejar que crezcan el pasto y los árboles.
No es lo que esperábamos,
lo entiendo,
pero así son las estaciones
dejan atrás sin nostalgia
las mejores cosechas
y el cobijo.
Todo, por una promesa incierta
más feroz y real que todas las perdidas.

domingo, 12 de agosto de 2012

Tres poemas - Alejandra Leticia Taylor


Noche de noches en horas perdidas
    de vidrios biselados
y el humo quebrado del café.
Te busco mirando el papel errante.

      


            Un pájaro
         detiene la tarde...
Bebe la gota suspendida en el verde.

                   

Dejé mi casa
   mis libros,
     mis plantas...
Y me extravié en la tarde,
en tu calle...

Crucé a tu vida.

Sin rastro – Guillermo Vidal

A veces es el sol,
ciego que ilumina
sin saber
lo que solo debe solo ser sombra,

o la furia que se esconde.
A veces es la lluvia que escurre la sangre,
y deja escapar las huellas
y al asesino.