miércoles, 26 de junio de 2013

Pasional - Fernando Andrés Puga


Resignado a quererte
hasta el fastidio
pretendí que la muerte
fuera el alivio
que librara a su suerte
mis desatinos.
Sólo fue otro calvario
para mi enojo.
Nos resecó los labios
con sus abrojos
y tiró en el osario
nuestros despojos.


Sobre el autor: Fernando Puga

Freeze – Odeen Rocha


El tránsito es un insulto a la existencia de las ciudades
Esta ciudad es un insulto a la existencia misma de la vida
Yo llegué tarde
La lluvia sigue
Se me hizo el freeze


Sobre el autor: Odeen Rocha

Lácrima Otoñal - Condessa Nadja


Otoños sueltos ocretizando sueños,
queremos y no somos dueños.
En el año no es abril lo más febril,
se deshoja una partitura en el atril.
Marchito y sobrio corre el viento
de lo que viví y ya no siento.



Sobre la autora: Condessa Nadja

sábado, 22 de junio de 2013

Catarsis IX (1998) - Antonio J. Cruz

Sol de siesta

trepando paredes vidriadas

inútil interposición

entre ardientes manos enlazadas.



Sol de siesta, brillante.

Me miré en el espejo de tus ojos

y les pedí un poema

a tus pupilas desorbitadas.



¿Sobre qué?

Sobre las nubes,

escuché mi voz que te decía.



Las nubes surcaron el espacio poético

y tuvimos nuestro poema,

navegando el cielo de la vida

en un esperanzado velo blanco.



Ahogamos de sueños la metáfora escrita,

le impusimos el eje al futuro anhelado

y desde las vibraciones de la sangre

trastocamos en signos lo que la mente dictaba.



Se asfixiaron los versos

con el trino de los pájaros,

con las campanas de los campanarios,

anunciando impetuosos

que un nuevo tiempo ha llegado.



Catarsis (1998)

Pregunta - Odeen Rocha

A veces me miro a mí mismo
Desnudo
De pie frente a mis ojos
Cubierto de santa barba
Y en mis ojos veo una pregunta
Lunar brillante y pura
Desde el fondo de mi alma:
¿Cómo puede existir hombre
Que sea feliz en este mundo
Sin tenerla así de grande?

Dotes - Esteban Moscarda y Fernando Andrés Puga

Doto a la parca de dotes
pido cancha.
El viento aúlla
Arrecian olas
Parpadean las esquinas
¿Dónde anda el desatino
que desnudó
desmembró
desmadejó mi destino?

Alas – Ana Caliyuri

En los pactos
del olvido
aletea
la memoria.

sábado, 8 de junio de 2013

la sonrisa - Héctor Ranea


¿qué me dirías durante esa danza
oscurecida en la marejada de nubes
de esa noche bermeja
turbulenta
?

rondas de cielos atados a los pies
tu falda
escondiéndome del mundo
la risa que adivino pero no escucho
ensordecido por un fragor de adentro
traído por mis memorias

tu risa
mi silencio
la sombra que nos canta su melodía
para que yo no pierda el ritmo
de la danza enrevesada

¿qué me habrás susurrado
que en mi olvido
solo mis piernas
recuerdan
los pasos de la danza y toda la memoria
se cierra en tu sonrisa
apenas adivinada
?

El Autor: Héctor Ranea

Este poema participa del proyecto: Más que mil palabras de La Tertulia de los Cuervos.

yacer - Héctor Ranea

amándonos en la punta del alfiler
donde cientos de ángeles imaginados
estudian con amor nuestros sexos



Autor: Héctor Ranea

Con María Bethania - Colombia Truque Vélez

ella canta y yo desenredo huellas, siguiendo el curso ascendente
del humo de mis cigarrillos, compactando en algún rincón toda la
imagen desdeñosa de ese recuerdo.
me gusta la propuesta atrevida de su voz, e incluso me entrometo en
el silencio desamparado que viene a llenar la pieza cuando ella
calla y el disco sigue girando sobre el plato: flexible, se aproxima mi
orgullo fingido —tu orgullo fingido— y llega ahora a poner sus pisadas
—mis pisadas— mansamente sobre el suelo.
desperezándome toda, abriendo despacio los ojos, consciente del
brillo oscuro de mi pelo reluciente, envío mi cuerpo hacia un definido
abrazo circular alrededor de un vacío en el que podrías haber
cabido tú.
entonces, todo vuelve a completarse con María Bethania, la modulación
precisa, lo cercano y lo ajeno en extraño acento, áspero júbilo
emocionado, y el aleteo secreto de tu ausencia que revolotea sin
cesar en la habitación, repite tus palabras, imita los gestos de tu
frialdad y me mira como desde tu más ferviente indiferencia.
y yo, sin nada más, acomodo el tiempo de mi reloj de pulso a la hora
soñolienta y ensombrecida que se abandona indolente contra los
cristales.
ella canta,
y yo, siguiéndole el rastro a tu olvido, he tensado, hasta romperlo en
matices que ahora se han deshecho en oscuridad, el hilo de esta
tarde.
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Autora: Colombia Truque Vélez

Ceguera ― Cristian Cano

Como ramas, mis brazos buscan no olvidarte.


Autor: Cristian Cano

al alba - Héctor Ranea

En la madrugada que vislumbra
una calandria llama puntual
la luz parece quitarle soledad



Autor: Héctor Ranea